Se trata del famoso fieltro, que no es otra cosa que lana tratada.
Hace dos veranos tuve la oportunidad de conocer la maravillosa ciudad de Tallin en Estonia. Es una ciudad medieval preciosa, me encantó! y se respira un aire artesanal entre sus calles muy particular.
Entre otras cosas, allí se trabaja mucho la lana y tuve la oportunidad de comprar vellones de lana de diversos colores. Los he tenido un poco abandonados, pero al fin me he decidido a trabajar con ellos.
Existen varias técnicas para trabajar la lana y "enfieltrarla", yo he optado por la técnica de la aguja y la esponja, pero existe también la posibilidad de trabajarla con agua caliente y jabón.
Para esta flor, realizé una capa de lana muy finita y después le dí forma de flor con la tijera.
En el caso de la aguja, se trata de ir poniendo capas de lana y con la aguja sobre la esponja irla pinchando para que así se vayan entrelazando las hebras de lana y se vaya cardando hasta convertirse en tejido. Si queremos añadir algún adorno de otro color, basta con superponer una hebra del color deseado y "pincharla" en la pieza deseada.
Cuantas más capas...más grueso el fieltro... se le puede dar forma directamente con la aguja o bien darle forma cortando con una tijera. Podemos sobreponer varias capas gruesas o finas, de diferentes formas y colores, incluso botones como adorno. Bastará poner un alfiler especial para broches en la parte de atrás con un poco de pegamento especial para tela.
Aquí me atreví a dar forma a unas mariquititas, me resultó más fácil hacer una gruesa pieza roja de mayor tamaño y después darle forma con la tijera.
Aquí tenéis mi primera colección al completo!! :-D
Espero que os gusten mucho y que os animéis a crear!!
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